Priscila Trinidad

Entrevista y Fotos Gerardo Sierra

Tuvimos el honor de hablar con Priscila Trinidad, una increíble artista mexicana que está creciendo y brillando en todo el mundo a través de sus patines de ruedas. Comenzó como todos, llevando una vida normal, yendo a la escuela y haciendo lo que se esperaba de ella. Sin embargo, todo cambió de un día para otro, transformándola en la patinadora internacional que conocemos hoy en día. Priscila expresa su arte a través de sus patines, explorando diversas formas de patinaje y combinándolas con diferentes tipos de arte. Durante sus años escolares, fue la estudiante aplicada, obteniendo calificaciones sobresalientes

desde el jardín de infantes hasta la universidad debido a la presión de los padres y las expectativas sociales. A pesar de su éxito, se sentía insatisfecha. Priscila se graduó con una licenciatura en Ingeniería Ambiental y de Sostenibilidad y trabajó en el campo durante tres años. Sin embargo, los desafíos que enfrentaban las mujeres en ingeniería, incluido el acoso, el racismo y la misoginia, la llevaron a cuestionar su camino. Se dio cuenta de que esto no era su verdadera vocación y cambió su vida.

Después de graduarse, Priscila luchó por encontrar un trabajo debido a su apariencia juvenil, sumiéndola en una profunda depresión. Fue durante este período difícil que descubrió consuelo en el patinaje sobre ruedas. Dedicando ocho horas al día al patinaje, se transformó física y mentalmente. Con 13 años de experiencia en diversos estilos de baile, Priscila canalizó su conciencia corporal en su patinaje, marcando el inicio de su carrera de siete años en el patinaje.

En nuestra conversación con Priscila, profundizamos en el tema principal de este número: el concepto de reinicio. Como una joven influenciada por valores tradicionales, ella veía esta oportunidad como una oportunidad para redefinir su narrativa, descubrirse a sí misma y determinar su propio camino. Priscila enfatizó que nuestras acciones pasadas y educación no nos definen. Un reinicio ofrece la oportunidad de cambiar los adjetivos que describen nuestras personalidades. Al dejar el pasado atrás, ganamos libertad, haciendo irrelevantes las opiniones de los demás. Estamos constantemente evolucionando y los reinicios son esenciales para el crecimiento.

Para Priscila, un reinicio significa convertirse en una persona diferente cada día, abrazando las versiones siempre cambiantes de nosotros mismos. A través de su trabajo como freelancer, entiende los desafíos que enfrentan los artistas, quienes a menudo se encuentran con conceptos erróneos sobre su profesión. Los artistas establecen sus propios límites de trabajo, ocasionalmente ofreciendo sus servicios de forma gratuita en situaciones específicas. Si bien esto puede ser una oportunidad o un apoyo para algunos, no todos lo merecen. Priscila destacó la importancia del discernimiento, especialmente al tratar con empresas multimillonarias que buscan explotar a artistas independientes.

Aprender a valorarse a uno mismo es crucial en tales situaciones.

Como artista, Priscila enfatizó la importancia de la fe, no solo en los resultados sino también en el proceso. Ha viajado por el mundo, convirtiendo sus sueños en realidad, y anima a otros a ser conscientes de sí mismos. Ella cree en el poder de los mensajes personales, transmitidos no solo a través del trabajo artístico sino también a través de elecciones de estilo de vida y palabras. Según ella, no estamos limitados a una versión de nosotros mismos; siempre podemos explorar nuevos caminos y abrazar el cambio.