Evangelion: 3.0 + 1.01 Thrice Upon a Time
Texto por JAI
Si eres fan del manga-anime o no, seguramente has escuchado hablar de esta serie, Neon Genesis Evangelion, o tal vez no conozcas su título de nombre, pero seguro más de una vez te haz topado con la hermosa Rei Ayanami, el icónico “Sad Shinji” o su increíble primer opening, Zankoku na tenshi no you ni (como un ángel cruel), interpretado por la sublime voz de Youko Takahashi (quien también interpreta el outro “Fly me to the moon”), el cuál se ha hecho viral gracias a la incontable cantidad de memes y ediciones que ha tenido siendo Drake y Josh, El chavo del ocho y Hitler algunos de los ejemplos más conocidos.
Estrenada en 1995 a manos de Gainax (Tengen Toppa Gurren Lagann, Akame ga kill) y dirigida por Anno Hideaki, Evangelion ha sido una gran obra admirada por chicos y grandes, que ha puesto a pensar a más de uno en su enredado y confuso mundo en el que los EVA (robots mecha gigantes) y sus pilotos, son obligados en pelar cara a cara contra unas extrañas criaturas llamadas “Ángeles”. Esta historia tuvo apenas veintiséis episodios, finalizando en 1996, pero fue tan grande su éxito que pronto anunciarían ovas, spin off y una tetralogía de películas.
Es aquí cuando en 2006 Gainax anunció esta saga de cuatro películas en las que nos volverían a contar la épica historia de Shinji, Rei y Azuka, agregando nueva información para aquellos fieles seguidores sedientos de teorías y respuestas.
Bajo el título de “Rebuild of Evangelion” esta saga de películas dio comienzo en 2007 con “Evangelion: 1.0 You are (not) alone)” y dos años después, en 2009 salió “Evangelion: 2.0 You can (not) advance” siendo ambas películas un reboot en formato cinematográfico de la serie original de 1995. Sin embargo, fue hasta 2012 cuando en su tercera entrega “Evangelion: 3.0 You can (not) redo” Hideaki agregó por fin nueva información a este mundo, aunque no todo fue campo de rosas, pues la recepción de esta última sin duda, ha sido la peor de todas, gracias a su abrupto y confuso final.
Es en ese momento cuándo la cuarta entrega se empezó a preparar bajo la dirección de Anno Hideaki y Tsurumaki Kazuya, todo comenzó a deteriorarse. Empezaron a trabajar en este proyecto hasta 2016 y después de retrasar año tras año su estreno desde 2018, por fin se había concluido una fecha, 27 de junio del 2020 “Evangelion: 3.0 + 1.01 Thrice upon a time” llegaría a los cines del país del sol naciente… O al menos eso era lo que habían planeado, pues las olas de COVID azotaron todo el mundo obligando a la producción a mantenerse resguardada por un año más.
Durante la pandemia, diversos carteles y teasers fueron saliendo en diferentes meses, la emoción del público era evidente y la cinta prometía mucho más que su entrega anterior, el último proyecto de Anno Hideaki relacionado con la saga de Evangelion parecía estar a la altura de la serie original.
Fue hasta el 8 de marzo del 2021, casi diez años desde el estreno de su último estreno en el momento, que la última entrega de Evangelion fue revelada al público japonés, conquistando a miles de personas dentro de su país de origen con su increíble historia y sublime animación, convirtiéndose en la película más taquillera en ese año y consiguiendo una recaudación de 96.8 millones de dólares tan solo en el primer mes de su estreno en Japón. El público extranjero no tuvo acceso a ella si no hasta el 13 de agosto en diferentes plataformas de streaming, pero ¿qué pasa con aquellos que esperan con ansias ver aquella película en pantalla grande? Para México, esta increíble película será transmitida el día 29 de septiembre del 2022, un año después de su estreno en Japón, y los boletos están a la venta AQUÍ para todos aquellos fanáticos o interesados en esta increíble serie llena de ciencia ficción (eso sí, te recomendamos aunque sea ver las tres anteriores películas para poder disfrutarla al máximo).
Para el resto de latinoamérica, a partir del 20 de septiembre los invitamos a revisar sus carteleras y estar al pendiente de cuándo y dónde se transmitirá esta increíble película que sin duda vale la pena ver en la pantalla grande.